sigo remando, en la canoa...

A veces creo que los proyectos, mientras son solamente eso, ideas pensadas y deseadas, no tienen fecha de vencimiento. Por eso me doy esa libertad de dejarlos pasear por mi mente, a veces recordando que están ahi, muchas veces dejarlos que se oculten detrás de los recuerdos y muchas otras veces, seguramente las mínimas, haciéndolos realidad.

Mientras escribo esto, recuerdo esa bendita idea de poder editar un segundo libro. La cual se está haciendo realidad, pero les aseguro que es una dura tarea de auto-conformismo constante, para lograr esa "calma de autor" que yo llamo, cuando todo está como el autor quiere.

Claro que es difícil, o por lo menos en mi caso, ya que no me dedico en tiempo completo a la escritura, así que tengo que buscar los momentos, y cuando aparecen, aprovecharlos al máximo.

Por el momento, sigo en la canoa creativa. Todavía disfrutando de los muchos frutos y satisfacciones que me sigue dando "Prohibido pisar el césped y otros cuentos".

Y mientras escribo estas palabras, me doy cuenta que éste es uno de esos momentos creativos, así que amigos, me despido...